¿COMO TRANSMITIR UN MENSAJE EFECTIVAMENTE?
Ya sea que queramos cautivar a nuestros estudiantes, o queramos convencer a un inversionista que nuestro producto es el mejor; la comunicación efectiva es una necesidad transversal en el ámbito laboral y personal. Este tipo de comunicación pretende que el mensaje que transmitimos alcance el efecto esperado en el receptor; y aunque debería ser el objetivo de nuestro relacionamiento, no hemos sido educados para aplicarla.
Los docentes, conferencistas, emprendedores, comerciantes y todos aquellos que se enfrentan con la tarea de persuadir o transmitir un mensaje, se verán beneficiados de aplicar estas reglas; que Frank Lantz ha desarrollado para políticos sobresalientes y grandes empresas y tienen como objetivo cautivar y transmitir un mensaje efectivamente:
Si quieres aplicar estas reglas en tus presentaciones, te invitamos a conocer a Flipwit y a probarlo GRATIS.
- Simplicidad: Aunque desde el mundo académico se nos entrene desde la complejidad y con la premisa del confunde y reinarás, los mensajes simples son los que causan un mayor impacto. Entonces, si queremos ser recordados, debemos dejar atrás los tecnicismos y las palabras rebuscadas.
- Brevedad: Aquí es muy aplicable el “menos es más”, ya que el cerebro está diseñado para prestar atención por periodos cortos de tiempo y no siempre se cuenta con una audiencia motivada. Así que, debemos dejar los discursos interminables y recurrir a un número reducido de palabras que expresen con precisión nuestro mensaje.
- Credibilidad: Solo nos enfocamos en lo genuino y cuando se generan dudas sobre la veracidad de un mensaje, por lo general activamos nuestro sistema de defensa. Por esta razón el mensaje debe ser sincero y sin contradicciones para que nuestra audiencia crea y esté abierta a la comunicación.
- Consistencia: Aunque queramos abarcar muchos temas, nuestra atención es reducida y la memoria trabaja de una manera particular. Así que debemos concentrarnos en pocos elementos, que deben ser reiterados a través de la repetición.
- Palabras memorables y sonoridad: A pesar de que parezca superficial, el cerebro tiene un sentido estético que se ve atraído por elementos como la simetría y el ritmo. En términos de discurso, cuando utilizamos rimas o conjuntos de palabras terminados en la misma letra o con cierta musicalidad, logramos una mayor recordación en nuestros receptores.
- Novedad: Aquí aplicamos un poco de neurociencia, y partimos que nuestro cerebro está entrenado para detectar y motivarse por los elementos novedosos. En este caso, si sorprendemos a nuestra audiencia con elementos o datos desconocidos, nuestro mensaje será asimilado y recordado.
- Positivismo: Nos encantan los finales felices, así que los mensajes con aspiraciones y que logran conectarse con nuestras emociones son mejor recibidos y recordados.
- Visualización: El cerebro funciona mejor cuando construye redes; por lo que si nuestros mensajes pueden crear imágenes mentales, será más fácil para nuestra audiencia retenerlos y recuperarlos en el futuro.
- Utilizar preguntas: Cuando se nos pregunta, nos sentimos incluidos; además el trabajo mental de procesar la respuesta hará que la audiencia se conecte con el tema y pueda recordarlo más adelante.
- Contexto: Debido a que somos seres emocionales, necesitamos de sentido para motivarnos y concentrarnos en algo. Por esta razón, la audiencia debe conocer la importancia del mensaje y cómo se relaciona con sus necesidades y aspiraciones.